La posibilidad de confirmar el rechazo a los recursos del Mineduc era esgrimida como una herramienta de negociación para obligar al Gobierno a reconocer la existencia de esta deuda como "un derecho" y abrir así una conversación con el profesorado que se encuentra movilizado desde hace varios días. Sin embargo, se impuso la tesis de que -si bien estas demandas son legítimas- forman parte de una solución integral para la educación pública en el país y no se justifica dejar sin financiamiento los programas de jardines infantiles, de salas cunas y otros que tienen gastos variables. [Actualizada]
Por El Mostrador
El Senado repuso este martes, por 20 votos a favor, 14 en contra y tres abstenciones, la partida de Educación del Presupuesto 2010 que había sido rechazada por la Cámara de Diputados por la falta de acuerdo entre el gobierno y el Colegio de Profesores respecto a la existencia de la deuda histórica al Magisterio.
La iniciativa había sido rechazada la semana pasada en la Cámara de Diputados, por lo que había llegado a la Cámara alta reducida a sólo mil pesos.
La acalorada discusión estuvo cruzada por argumentos a favor y en contra de la demanda de los docentes en orden a conseguir, en el marco del debate presupuestario, un acuerdo con el Ejecutivo por una solución al tema de la deuda histórica.
Precisamente, los dirigentes nacionales del Colegio de Profesores, así como los representantes de la organización ciudadana Educación 2020 siguieron desde las tribunas toda la jornada protagonizando algunos incidentes que motivaron la suspensión de la sesión tras concluir la votación de la respectiva partida.
En la oportunidad también se encontraban presentes en la Sala los ministros de Hacienda, Andrés Velasco; de Educación, Mónica Jiménez; del Interior, Edmundo Pérez Yoma; de la secretaría general de Gobierno, Carolina Tohá y el Director de Presupuestos, Alberto Arenas.
Cabe señalar que, la posibilidad de confirmar el rechazo a los recursos del Ministerio de Educación era esgrimida como una herramienta de negociación para obligar al Gobierno a reconocer la existencia de esta deuda como "un derecho" y abrir así una conversación con el profesorado que se encuentra movilizado desde hace varios días.
Sin embargo, se impuso la tesis de que -si bien estas demandas son legítimas- forman parte de una solución integral para la educación pública en el país y no se justifica dejar sin financiamiento los programas de jardines infantiles, de salas cunas y otros que tienen gastos variables.
Los senadores Mariano Ruiz Esquide (DC), Camilo Escalona (PS), Eduardo Frei (DC), Soledad Alvear (DC), Evelyn Matthei (UDI), Hosaín Sabag (DC), Andrés Chadwick (UDI), Guido Girardi (PPD), Ricardo Núñez (PS), Nelson Avila (PRSD), Carlos Bianchi (Ind.), Jaime Gazmuri (PS) se mostraron partidarios de reponer los recursos para Educación y aprobar la partida.
Asimismo instaron a las autoridades a evaluar una salida al conflicto que considere elevar el desempeño docente tanto en los establecimientos públicos como en la formación que ofrecen las distintas carreras de Pedagogía. Además señalaron la necesidad de mejorar las pensiones de los docentes que jubilaron con montos muy bajos.
En tanto, los senadores Alberto Espina (RN), Jaime Orpis (UDI), Carlos Ominami (Ind.), Andrés Allamand (RN), Carlos Cantero (Ind.), Alejandro Navarro (Ind.), Antonio Horvath (RN), Hernán Larraín (UDI), Roberto Muñoz Barra (PPD), Adolfo Zaldívar (PRI) y Jaime Orpis (UDI) optaron por rechazar la partida de Educación debido a que existe un compromiso del Ejecutivo suscrito en el Protocolo de la Ley de Presupuesto del año pasado que fue finalmente desconocido.
Asimismo rechazaron los argumentos que señalaban que con el rechazo de esta partida quedaban sin financiamiento muchos programas esenciales para los niños y niñas del país. Recalcaron que el tema de fondo es que esta era una oportunidad para resolver un tema pendiente y generar una voluntad de acuerdo que ni siquiera exigía soluciones en el corto plazo sino una fórmula para abordar el problema.
A su turno, los senadores Juan Pablo Letelier y José García Ruminot consultaron sobre el alcance del rechazo a la partida de Educación en la Cámara de Diputados que redujo a $1.000 pesos los gastos variables y solicitaron las precisiones correspondientes a la Dirección de Presupuestos sobre las facultades del Ejecutivo para reponer estos recursos.
Profesores indignados
Tras la decisión, los dirigentes del Colegio de Profesores que se encontraban en las tribunas, encabezados por el presidente del gremio, Jaime Gajardo, gritaron consignas contra los parlamentarios de la coalición gobernante, que rechazaron la posibilidad de negociar con los docentes, por lo cual fueron desalojados del Congreso.
Tras el desalojo, Gajardo aseguró que el gremio, que ya completa más de veinte días de huelga, toma este resultado "con tranquilidad" puesto que seguirán "avanzando en la lucha por la deuda histórica".
"Nosotros estamos muy tranquilos y no nos sentimos derrotados para nada", precisó el dirigente gremial, quien aseguró que este miércoles junto a las bases del magisterio se analizarán los pasos a seguir.
En tanto el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, valoró la aprobación de la normativa, más allá de la polémica generada, y sostuvo que "todo presupuesto tiene sus bemoles".
"Siempre hemos tenido que trabajar pero siempre el parlamento al final del día ha dado su aprobación a los presupuestos de la presidenta (Michelle) Bachelet", agregó Velasco.
Los profesores demandan para volver a trabajar que se establezca un acuerdo que reconozca la "deuda histórica", se cancele en un plazo prudente, que se pague el bono Subvención Adicional Especial (SAE) y no se hagan descuentos por los días no trabajados.
La llamada "deuda histórica" se generó en 1981, cuando el Estado traspasó las educaciones básica y media a los municipios un año después de que la dictadura militar anunciara un bono especial para compensar los bajos sueldos de los maestros, que se pagaría en cuatro cuotas, en años sucesivos.
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